Salvador Allende / Por todo Chile

SALVADOR ALLENDE / POR TODO CHILE

(Mario Benedetti / Daniel Viglietti)

 

Para matar al hombre de la paz
para golpear su frente limpia de pesadillas
tuvieron que convertirse en pesadilla,
para vencer al hombre de la paz
tuvieron que congregar todos los odios
y además los aviones y los tanques,
para batir al hombre de la paz
tuvieron que bombardearlo hacerlo llama,
porque el hombre de la paz era una fortaleza
Para matar al hombre de la paz
tuvieron que desatar la guerra turbia,
para vencer al hombre de la paz
y acallar su voz modesta y taladrante
tuvieron que empujar el terror hasta el abismo
y matar mas para seguir matando,
para batir al hombre de la paz
tuvieron que asesinarlo muchas veces
porque el hombre de la paz era una fortaleza.

No, no, no,
no son campanas,
no, no,
no son de muerte
que son de vida,
son todo un pueblo
de compañeros,
todos hermanos,
cientos de miles
por todo Chile.

Sí, sí, sí,
que son obreros,
sí, sí,
son campesinos,
son los mineros,
los estudiantes,
los pobladores,
los que resisten,
cientos de miles
por todo Chile.

No, no, no,
nadie te olvida,
no, no,
Manuel Rodríguez,
de tu silencio
nacen Violetas,
se abren caminos
y crecen niños,
cientos de miles
por todo Chile.

Para matar al hombre de la paz
tuvieron que imaginar que era una tropa,
una armada, una hueste, una brigada,
tuvieron que creer que era otro ejercito,
pero el hombre de la paz era tan solo un pueblo
y tenia en sus manos un fusil y un mandato
y eran necesarios mas tanques mas rencores
mas bombas mas aviones mas oprobios
porque el hombre de la paz era una fortaleza
Para matar al hombre de la paz
para golpear su frente limpia de pesadillas
tuvieron que convertirse en pesadilla,
para vencer al hombre de la paz
tuvieron que afiliarse siempre a la muerte
matar y matar mas para seguir matando
y condenarse a la blindada soledad,
para matar al hombre que era un pueblo
tuvieron que quedarse sin el pueblo.

Sí, sí, sí,
el cobre nuestro,
sí, sí,
no ha de bastarnos,
queremos todo,
lo siempre ajeno,
lo nunca nuestro,
lo tomaremos,
cientos de miles
por todo Chile.

No, no, no,
manos vacías,
no, no.
Si nos preguntan
contestaremos
con el arado,
con el martillo
y el guerrillero,
cientos de miles
por todo Chile.

Sí, sí, sí,
con alegría,
sí, sí,
haremos nuestra
la cordillera,
la patria toda,
su ancha ternura,
su fuerza larga,
cientos de miles
por todo Chile,
todos armados
por todo Chile.